Con la llegada del frío hay enfermedades que pueden afectar, aún más, a nuestro sistema respiratorio y que, resumiendo, se dividen en obstructivas (bronquitis crónica, enfisema, asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica –EPOC-), restrictivas (fibrosis, neumotórax y derrame pleural) e infecciosas (bronquitis aguda, neumonía y tuberculosis).
Recomendaciones de alimentación:
Es indispensable la ingesta de líquidos que por orden de importancia serán: agua, zumos de vegetales y frutas, infusiones y caldos vegetales. Además de sus propiedades antibacterianas, antivíricas, etc., se hace necesaria como medida para fluidificar el moco. Igual de importante es una dieta rica en frutas, vegetales, grasas y proteínas de alto valor biológico e hidratos de carbono complejos.
Eliminar de la dieta los lácteos y sus derivados, ya que promueven la producción y densidad del moco.
Evitar el consumo de azúcares simples ya que disminuyen significativamente la capacidad de respuesta inmunitaria.
ALIMENTOS BENEFICIOSOS
ACEITES DE SEMILLAS DE PRIMERA PRESIÓN EN FRÍO: Algunos ácidos grasos esenciales son necesarios para la formación de anticuerpos. Los ácidos grasos poliinsaturados reducen la respuesta de las vías respiratorias frente a los factores causantes del asma.
AJO: Es un gran antibiótico y mucolítico natural, además de estimulante del sistema inmunitario gracias a su contenido en aceite esencial cuyo componente principal es la aliína, compuesto sulfurado que se transformaen aliicina. Es activo frente numerosas bacterias, virus, hongos y parásitos,potenciando la acción de los linfocitos T y de los macrófagos. PUERRO: contiene un aceite esencial similar al de la cebolla, con acción mucolítica.
BORRAJA: Alimento estrella en Aragón, contiene mucílagos de acción suavizante para los bronquios. Además es sudorífica, por lo que contribuye a la eliminación de desechos propiedades mucolíticas, expectorantes, broncodilatadoras y antibióticas. Su mayor actividad se muestra al tomarla cruda o inhalar su esencia. Está demostrado que uno de sus compuestos, el difeniltiosulfinato, tiene mayor actividad antiinflamatoria que la prednisolona, uno de los antiinflamatorios más comúnmente utilizados. Contiene también quercitina, un flavonoide con actividad antiinflamatoria y cuya acción es la de estabilizar las membranas de las células liberadoras de histamina.
CÚRCUMA y EL JENGIBRE: tienen actividad antiinflamatoria y mucolítica.
DÁTILES: Tienen la capacidad de ablandar la mucosa bronquial. HIGOS: Son calmantes de la tos, facilitan la expectoración y suavizan las vías respiratorias. Es un remedio que se utiliza como jarabe desde muy antiguo.
FRUTA: Aporta vitaminas y elementos fitoquímicos que facilitarán la eliminación de toxinas como la nicotina del tabaco. Utilizadas en zumos son muy convenientes en estos casos. Por ejemplo la granada contiene sustancias como el ácido elágico y algunos alcaloides con actividad inhibitoria sobre virus, bacterias y hongos y en el caso de las grosellas también son ricas en vitamina C, eficaz agente antiinfeccioso. El limón tiene actividad viricida (mata virus) y bactericida (mata bacterias) y es rico en vitamina C al igual que el Kiwi y el Litchi.
HORTALIZAS: Las de hoja verde o las de color rojo son ricas en betacarotenos, que van a aumentar la resistencia de las células bronquiales a los daños causados por las afecciones respiratorias.
MIEL: Tiene acción antitusígena, sedante y suavizante de las vías respiratorias. Puede actuar de elemento desensibilizante frente al polen ambiental causante de alergias.
PICANTES: Son un alivio en los casos de crisis asmáticas. Estos alimentos estimulan las terminaciones nerviosas de las vías digestivas, las cuales generan la orden de liberar líquidos en la boca, la garganta y los pulmones. Esta secreción impide que el moco se obstruya en las vías respiratorias. PIMIENTO: La capsicina, sustancia picante del pimiento, ejerce actividad antiinflamatoria cuando se ingiere.
PROTEÍNAS:Las inmunoglobulinas son moléculas proteicas. Una alimentación pobre en proteínas de buena calidad podría dificultar su disponibilidad.
TOMATE: Contiene carotenoides y minerales de acción inmunoestimulante. También la zanahoria tiene un alto contenido en vitamina A, indispensable para el buen estado de las células que recubren el interior de los bronquios.